Los profesionales de la salud definen la esterilidad como la incapacidad de quedarse embarazada tras al menos un año intentando concebir. En el caso de las personas mayores de 35 años, el tiempo para intentar concebir se reduce a seis meses.

Si estás luchando contra la esterilidad, debes saber que no estás solo. La esterilidad afecta a una cantidad estimada de 186 millones de personas en todo el mundo, según la Organización Mundial de la Salud. Y, aunque la mayoría de la gente cree que la esterilidad afecta solo a las mujeres, los hombres tienen las mismas posibilidades de llevar la carga. La esterilidad puede ser una de las cosas más difíciles a las que tenga que hacer frente una pareja.

Una investigación ha revelado que el estrés psicológico que se experimenta al lidiar con la esterilidad es similar al de las personas que afrontan enfermedades como el cáncer, el VIH y el dolor crónico. Además, las medicaciones que se usan para tratar la esterilidad también se asocian a síntomas psicológicos como ansiedad, depresión e irritabilidad.

El aprendizaje de formas positivas de afrontar el estrés y la ansiedad de la esterilidad puede resultar muy beneficioso tanto para tu bienestar mental como para el físico. Aquí podrás ver algunos consejos que pueden ayudarte.

 

La clave para afrontar la esterilidad es reconocer que estás pasando por un momento difícil. Tus sentimientos pueden abarcar desde tristeza y culpabilidad hasta un intenso enfado o desesperación, pero debes saber que es perfectamente normal sentirse así. 

La esterilidad puede pasarle factura a una relación, generando a menudo resentimiento no expresado, sentimientos de inutilidad, presión sexual y tensión entre las parejas. Hablar sobre cómo se sienten de forma frecuente hará que los dos miembros de la pareja estén en la misma página y puedan apoyarse en este difícil momento.

Los expertos médicos afirman que la aflicción que provoca la esterilidad es similar al sentimiento que se tiene cuando se pierde a un ser querido. Por eso es buena idea hablar con un consejero. Los consejeros están formados para ayudar a parejas o personas con los sentimientos de dolor y el trauma que la esterilidad puede causar. Las sesiones de asesoramiento son un espacio seguro donde podemos hablar de nuestros sentimientos, miedos y preocupaciones con un profesional cualificado que puede ayudarnos a crear estrategias para afrontar nuestros sentimientos.

La esterilidad no acaba con la posibilidad de tener una familia para todo el mundo. Hay muchas opciones diferentes disponibles. Entre los tratamientos pueden incluirse distintas medicaciones e inyecciones para la fertilidad, procedimientos quirúrgicos o concepción asistida como la fertilización in vitro y la inseminación artificial. E incluso si los procedimientos y la medicación para la fertilidad proporcionados no funcionan, existen otras opciones como la subrogación y la adopción.

Aunque los amigos y la familia son maravillosos, si no han pasado por lo mismo que tú, puede resultar difícil empatizar. Los grupos de apoyo online y en persona centrados en los problemas de esterilidad son lugares estupendos donde conocer a personas que están pasando por situaciones similares y que, por tanto, te entienden, ofreciendo consejos y ánimo, y compartiendo experiencias. 

Lidiar con la esterilidad puede ser un momento muy estresante lleno de incertidumbre. Reserva tiempo para actividades agradables y relajantes como la meditación, el yoga, las técnicas de respiración o los paseos por la naturaleza. Hacer ejercicio, comer sano y planear actividades divertidas también puede ayudar a gestionar el estrés, además de equilibrar tu vida y la de tu pareja.