¿Sufres gimtimidación?

Noviembre de 2023 

Sigue nuestros mejores consejos sobre cómo moverte por el gimnasio y conseguir tus objetivos.

La gimtimidación es la ansiedad que puedes sentir al ir o entrenar en un gimnasio. No es solo una palabra de moda de los medios de comunicación. Se trata de un fenómeno que puede ser un auténtico obstáculo para la realización de ejercicio. 

Existen muchas razones diferentes por las que ir al gimnasio puede provocarte ansiedad, como el miedo a que otras personas te juzguen, la presión de no saber usar las pesas y máquinas, o no sentir seguridad en cuanto a tu cuerpo y compararte con otras personas que van al gimnasio. 

Por suerte, puedes luchar contra la gimtimidación de varias maneras y hacer que tu asistencia al gimnasio resulte más satisfactoria. Estos son nuestros mejores consejos: 

Existen muchas clases diferentes de gimnasios. Es buena idea indagar un poco hasta que encuentres el gimnasio adecuado para ti, ya sea un pequeño gimnasio boutique, un gimnasio solo para mujeres o uno de grandes dimensiones con numerosas clases y equipo entre los que elegir. 
La mayoría de los gimnasios ofrecerán recorridos introductorios por sus instalaciones. Durante los mismos se explicará cómo usar todo el equipo, las pesas y las máquinas de forma segura. Si tienes alguna duda sobre algo, es el momento perfecto para solventarla. 
Los gimnasios pueden estar abarrotados durante las horas punta, lo que puede contribuir al factor de intimidación. Intenta acudir al gimnasio fuera de las horas punta, es decir, cuando hay menos gente. Esto puede darte más espacio y tiempo para hacer tus ejercicios sin sentirte cohibido. También es posible que dispongas de más tiempo para usar distintos tipos de equipo, lo que te permite probar nuevos aparatos que aún no habías utilizado. 
Familiarízate con el equipo y los ejercicios del gimnasio a través de recursos, vídeos o aplicaciones online. Esto te ayudará a hacer frente a los nervios que puedas tener y a estar mejor preparado para lo que te espera antes de tu primer entrenamiento. 
Mantener tu compromiso es una de las mejores formas de garantizar tu asistencia al gimnasio desde el principio (que a menudo puede ser lo más difícil). Ve con un compañero de gimnasio y haced un pacto para ayudaros el uno al otro. Entrenar con un amigo puede marcar la diferencia al motivaros y apoyaros mutuamente en vuestro itinerario de forma física. 
Si eres nuevo en el gimnasio o simplemente deseas mejorar tus conocimientos sobre los ejercicios y tu forma física general, contratar a un entrenador personal puede ser una forma excelente de empezar y garantizar que obtengas los mejores resultados posibles. Los entrenadores personales crearán un plan de entrenamiento personalizado solo para ti y te enseñarán las técnicas adecuadas y el equipo de gimnasio que necesitas. 
En ocasiones, los gimnasios parecen intimidantes porque te preocupa tu apariencia. Ponte aquello que te haga sentir cómodo mientras entrenas, ya sea una camiseta ancha y pantalones cortos de gimnasia, o pantalones de yoga ajustados y una camiseta de tirantes.
Escuchar música puede ayudarte a motivarte y seguir allí. Llevar auriculares puede ayudarte a ignorar las distracciones, de modo que puedas centrarte en tu entrenamiento. Averigua qué tipos de canciones te animan a mantenerte activo y elabora una lista de reproducción lo suficientemente larga para abarcar toda la sesión de entrenamiento. 

Poder visualizar el progreso hacia tus objetivos de forma física puede mejorar tu motivación para seguir yendo al gimnasio. Marca tus objetivos de forma física y elige un plan de acción, monitoriza tus actividades para alcanzar tu objetivo, únete a desafíos para seguir motivado y encuentra consejos sobre cómo vivir y mantener una vida saludable.

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